Hoy se fallan los premios Enor de arquitectura. Es la quinta edición, y como todas las anteriores el acto de entrega tendrá lugar en Vigo. Se ha convertido en un galardón de referencia para las creaciones hispano-lusas y si echamos un vistazo a la lista de finalistas vemos nombres y obras de vanguardia.
En esta lista me llama la atención un edificio que suena a tipología: La "Casa da maxia" en Ourense. Se trata de la rehabilitación de un inmueble en la plaza da Ferreiría del casco viejo de la ciudad de As Burgas. La llevan a cabo Trespès arquitectos: un estudio de tres jóvenes gallegos menores de 40 (el único del elenco que cumple estos requesitos)... de la generación X, la generación de Metagénesix...de esa sobradamente preparada a la que le está costando hacerse un hueco.
El punto de partida de esta intervención es una galería, que ahora se reinterpreta desde el enfoque de la arquitectura bioclimática: Con un juego de opacidades y transparencias de las superficies acristaladas y las láminas de cedro en vertical logran tamizar las severidades del calor orensano.
Su interior está, por supuesto lleno de magia, de ilusión. De la ilusión del que proyecta, del que promueve y esperemos que pronto del que lo visita.
Para él, para el espectador hay preparadas un montón de sorpresas. Para el mago que espera sorprender hay, seguro, un montón de trucos escondidos a lo largo de su itinerario.
Como de ilusiones también se vive...el gran público espera que las administraciones salgan del atolladero económico en el que estamos metidos y puedan darle el último impulso para llenarla de vida...
...¡de magia!
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